sábado, 17 de octubre de 2009

En esta tenebrosa nada oí canciones semejantes


Sentí como si saliera de mi cuerpo, me estaba observando como mera espectadora. Ahí me di cuenta que yo estaba mal, me sentía ajena a mi, ¿Como no podía decir otra palabra? Hacía tiempo que no me pasaba eso. Me explico. Esa sensación d vacío, de darte cuenta que ya no estamos en el año 2000 y que ya es 2009, que han pasado varios años desde el año que crees que es, de la época en la cual te quedaste pegada hace siglos, y ves hacia atrás y piensas que no has hecho nada. Te arrepientes por el tiempo que has perdido haciendo nada, stando sentada frente al computador navegando por Internet buscando cualquier tontería que se te ocurrió en el momento. Piensas que podrías morir mañana o te sientes vieja, sientes que los años han pasado por ti y por tu vida sin molestarse en avisarte que cada minuto que pasa estás más vieja. Sientes la necesidad en ese mismo momento de llorar y golpearte si es necesario por el desperdicio temporal que has creado. Pero luego, cuando te calmas un poco piensas que no debes continuar perdiendo tu tiempo en lamentos sino que deberías remediar la situación y cuando estás dispuesta a eso piensas: ¿Que es lo que quiero hacer realmente? Y ahí...cri-cri. Dices: ¿Que quiero? Y lo peor es que no puedes tomar tu agenda y llamar a cada persona que tienes registrada para preguntarle o hacerle una encuesta, porque eres solo tú quien tiene la respuesta y luego...te desesperas, porque ni tú te entiendes entonces piensas: ¿Cómo pretendo entender al resto? ¿Cómo quiero que el resto me entienda si ni yo misma sé que quiero? Y bueno, ahí piensas que no tienes nada más que hacer que resignarte. Después de nuevo viene esa curiosidad y dices que quieres cambiar y poco te falta para dar un salto o decir !Si! Hasta que te das cuenta que todos tus sueños se desvanecieron y que ya no quieres nada, no deseas nada. Sientes que ya no tienes nada por lo que luchar y te estancas. Sientes que perdiste la batalla y que todas las cosas que quisiste alguna vez ya están obsoletas o simplemente las encuentras estúpidas o en el peor de los casos, ya las tienes y nunca te dejaron satisfecha. Yo creo que ahí te das cuenta que estás madurando y que hay cosas que simplemente no llenan los vacíos de tu corazón, y ahí comienzan las contradicciones y las sorpresas. Te das cuenta que las cosas que nunca te gustaron te comienzan a gustar, lo que nunca esperaste sentir lo experimentaste, descubres nuevas pasiones, nuevos métodos de vivir y de pasar tu tiempo. Eso me paso a mí, con las mismas palabras. De un día, desde el odio a los libros, los amé. Me comenzó a encantar escribir, pero sientes que nada es suficiente. Todos tenemos algo que realmente nos apasiona e intentamos darle todo el tiempo disponible que tengamos: por ejemplo estamos en la fila del banco pensando en lo que haremos, llegamos a la casa, y hacemos ese supuesto proyecto que craneamos tanto y al final lo encontramos mediocre. Y ahí te deprimes porque piensas que lo único que haces bien lo haces mal!! o sea...lo q creías hacer excelentemente bien o lo que creías tener talento lo haces mal. No debemos negar ni hacernos los cínicos diciendo que no necesitamos reconocimientos de vez en cuando.
La vida suele ser irónica y hasta triste a veces, aunque otras también es feliz y tiene muchos matices alegres. La vida a veces nos desencanta con situaciones que son más cotidianas de lo que creemos, por ejemplo cuando pierdes un amigo por algo estúpido para el, pero algo importante para ti, por ejemplo una traición, una mentira que dolió y que dejó tu corazón roto, cuando sientes que entregas todo por tus amigos, eres incondicional, siempre estás ahí y te das cuenta que a ellos la relación no les interesa tanto como a ti. También existe otro tipo de situaciones: tratas de analizar todo, y hay ciertos autodescubrimientos que nunca pensaste hacer, te das cuenta que hay ciertas cosas que te molestan y otras que te agradan más que antes, y otras veces te das cuenta que nada te gusta, nada te satisface, y que vives entorno a nada, que tu centro se perdió, que ya nada te alegra y nada te deja conforme. Pero luego, escuchas una canción o ves una película, o visitas una buena pagina web, o ves una linda foto, y sientes que eso cambia, sientes que apareció el sol nuevamente y tienes ganas de continuar luchando por lo que quieres o mejor dicho...seguir luchando por buscar algo que realmente te haga sentir. Y ahí te ríes y dices: Soy bipolar o muy cambiante. Pero no importa: te dan ganas de luchar por el amor que parece tan perdido a veces.

(Título sacado de "Informe" de Saiko)

No hay comentarios: