viernes, 18 de febrero de 2011


Y yo no creía en el 14 de febrero porque todos los tarúpidos compran globos enormes con forma de corazón a sus pololas solo porque todos lo hacen una vez al año, para no ser menos.
Y me cambiaste el día. Y yo me desmoronaba de a poquito y tú te quedaste ahí. Y fui una imbécil y una estúpida al alejarte, al empujarte lejos, porque con indiferencia no bastaba, tenía que alejarte, mucho, con una fuerza bruta que ni yo reconocí y ayer, luego de verte, comprendí que no soy más que una tarada al hacer eso, y con ver directo a tus ojos comprendí que estaba actuando mal, que intento luchar contra mi costumbre innata de encerrarme en mí y estar sola, de alejarme de todo y de todos, de crear mi burbuja y no salir nunca más de ahí.
Regálame algo? Nunca te rindas conmigo.

1 comentario:

{Desde el circulo polar ...} dijo...

Excelente texto!
visito tu bolg hace algun buen tiempo y es genial ...
al final uno necesita que solo le recuerden que no existe dia concreto para demostrar el amor real...
Saludos.