¿Por qué amamos a Carrie Bradshaw?

Cada vez que veo Sex and the city intento imaginar la cara que pongo al ver a Carrie con sus aventuras y desventuras, algunas amorosas, otras amistosas, algunas profesionales y algunas más cotidianas. Carrie suele ser una especie de diva para todos lo que ven Sex and the city, es evidente que cada uno tiene su favorita, no es pecado amar la inocencia e idealismo de Charlotte y tampoco amar los chistes o las historias sexuales de Samantha o las anécdotas que vive Miranda, pero debe ser Carrie la más amada, y hoy me pregunto el por qué. Puede que sea por su amplio sentido de la moda, porque fue ella quien popularizó entre las personas que no saben mucho de moda marcas como Gucci, Chanel, Prada, Armani y sobretodo Manolo. Carrie ha tenido relaciones tan diferentes una de la otra, que lo más probable es que con más de alguna situación nos sintamos identificadas, todas tenemos un Mr. Big en nuestras vidas, un Ethan haciendo muebles y ofreciéndonos vivir juntos con el departamento pagado, o un ruso que sea frío y que no desee las mismas cosas que nosotras, y un amigo gay que nos adore con su alma. Amamos la vida de Carrie, porque vive intensamente y a ratos se frena, porque tiene certezas y también dudas, porque puede tener días excelentes y días horribles y por sobretodas las cosas, porque cree ciegamente en la amistad verdadera, porque Carrie sin Samantha ni Miranda ni Charlotte, no sería Carrie Bradshaw ni tendría ideas para escribir en su laptop mientras fuma y se toma la cabeza cuando pierde una idea. Por eso amamos a Carrie, porque tiene defectos y virtudes al igual que todos nosotros, porque aunque sea un personaje ficticio, se siente real y cercano.