Quizás mañana esté ciego

Es como nunca poder dejar ir algo, retenerlo en tus manos, para triturarlo con toda la ira del mundo que pueda recorrer hasta el último de tus músculos.
Y me sacan de quicio y no puedo contenerme, es parte de la naturaleza y de mi naturaleza ser así. No soy Jesús para poner la otra mejilla. En ocasiones quisiera dejar de ser tan reactiva a una mínima provocación, sin poder contenerme ni dejarlo ir, sin respirar hondo o calmarme.
Es como si empezara a ver todo en rojo y la ira se vuelca a mis ojos, volviéndolos demoníacos. Me siento destruir paulatinamente, en ocasiones. Todos los días. Probablemente todo el año y toda mi vida.

(Título sacado de "Arrepentimiento" de Lucybell)